El otro día recibí un mail de una amiga que decía así:
Oye Nacho, tengo una duda, a ver qué opinas: ¿tú crees que en una web es interesante verter las últimas actualizaciones de las redes sociales, Twitter y Facebook? ¿O puede resultar contraproducente? ¿Qué harías tú? Supongo que depende, claro. Haz una entrada de eso en tu blog!!
Pues venga, vamos a ponernos manos a la obra e intentar responder a esta muy compleja pregunta con, cómo no, 7 consejos:
1) Lo primero que debemos preguntarnos es qué buscamos tanto con nuestra presencia en redes sociales como con nuestra página web. De ello dependerá finalmente el uso que demos a dichos “canales” de comunicación. Decidir si publicas tus actualizaciones en redes sociales directamente a tu web dependerá del tipo de publicaciones, del momento, del horario, de la frecuencia… De mil factores.
2) No soy de verdades supremas ni afirmaciones universales, así que, como decía Jarabe de Palo, todo depende. En N7 tenemos clientes en los que sí aparecen sus “feeds” de redes sociales en la portada de la web y en otros que únicamente hay enlaces a los perfiles, o widgets para hacerse fan/follower directamente sin tener que salir de la página. Esto último es lo mínimo necesario siempre.
3) Tener una buena sección de enlaces de interés en la web, mejor todavía si están actualizados a través de RSS, es algo que aporta valor y puede sustituir/mejorar tu propia presencia social, al menos en las primeras fases.
4) Insertar publiciaciones puntuales de especial relevancia, en lugar de todo el feed, es una buena alternativa a los clásicos widgets de los que hablaba antes. Para ello las redes sociales nos proporcionan un código HTML5 o IFRAME compatible con cualquier web o blog.
5) El blog es otra incógnita de esta ecuación, su correcta actualización es bueno motivo para no incluir las actualizaciones directamente en la web, eso sí, que el blog esté incluído en la web como una sección más, nada de tenerlo colgado de otra URL, o perderás visitas de la web al blog y viceversa. Aprovecho para recordar que un tener blog corporativo con la extensión “worpdress.com” o “blogger.com” es, para mí, tan atractivo como un mail “oficial” de @hotmail.com o @yahoo.es
6) Plantea una estrategia (a largo plazo) de publicaciones en función de los objetivos deseados, intercalando las publicaciones tácticas (a corto plazo).
7) Termino haciendo hincapié en la importancia de gestionar correctamente las redes sociales corporativas, más vale no tener presencia que hacerlo mal. Por favor, no enlaces redes entre ellas, dedica 30 segundos a hacerlo independientemente en cada una. Hay pocas cosas que molesten más en Twitter que una actualización que “viene” de Facebook cortada por la diferente extensión. O un tweet que aparece en Facebook con las “@” de las menciones, sin aportar más que confusión.
Nota: Foto de Pixabay
Me gusta este tema que has tocado, por lo general no es encontramos de todo y muy variado en webs y blogs, desde mucha integración a nula. Te topas por ejemplo con webs que gastan recursos y tiempo en tener presencia en redes sociales pero que por ejemplo tienen los iconos sociales en pequeño y en la esquina de abajo de la web, en el footer donde nadie va a verlo. Esto es lo más habitual por desgracia, y son muchas las agencias que hacen webs que siguen haciendo esto, cosa que no entiendo. Luego están los que se montan una web/blog con todas sus redes sociales integradas mediante widgets pero que sin embargo pecan de eso mismo, no tienen más contenido interesante que ese de los widgets para el visitante, por tanto les duran nada. Y luego están las webs muy pero que muy curradas, con contenido interesante, pero que sin embargo tienen una enorme cantidad de widgets integrados de redes sociales en las que la presencia y contenido es nulo o pésimo, todo junto.
En fin, que en el estudio de cada caso como bien dices está la respuesta acertada.
Hay de todo en la viña del Señor… 😉
Como bien dices Nacho, esto depende de mil factores y hay que estudiar cada caso en particular. Existen y estarás de acuerdo algunas reglas básicas. Por ejemplo no poner enlaces en la web a redes sociales si no hay contenidos frescos, muchas veces desde la web supone un medio para saber “lo viva” que está esa web. Si pinchas en un enlace a red social dede la web y hace 6 meses que no se ha puesto nada en esa red tienes a alguien que piensa que eso está muerto.
Por mi experiencia lo mejor es que haya enlaces desde redes sociales “vivas” a la web y al Blog. A la inversa no tiene tanto potencial. Las redes sociales son chutes de “adrenalina” para la web y para el blog, el blog es algo a más largo plazo más permanente. En general hay que aportar cosas interesantes y mantener vivo el tema, no se trata de poner enlaces a diestro y siniestro.
¡Saludos!
Muy de acuerdo, Francisco.