• Ciencia,  Un tuitero en papel

    El espacio interior.

    La puerta no cierra. Lleva así varios meses. Tengo grabado el ruido que produce y dejaría de hacerlo si me animo a solucionar el asunto. En el fondo le tengo cariño así que seguirá rota. Tampoco es que haya algo de lo que me necesite proteger encerrándome en esta cochambrosa cápsula espacial que ahora es mi hogar. La vida en la Luna no es lo que era. Aquí no quedamos más que cuatro gatos solitarios para los que ya nada tiene mucho sentido. Debo rondar los sesenta años aunque no estoy del todo seguro. Cuando partió el último transbordador de vuelta nos quedamos incomunicados. Lo sabíamos y lo asumimos, mantenerse…

  • Ciencia,  Comunicación,  Economía,  Historias de un publicista

    Ratoneras

    Si metes una rana en agua hirviendo saltará del recipiente instantáneamente, pero si la metes en una olla a temperatura ambiente y la vas calentando poco a poco hasta la ebullición, se quedará frita sin darse cuenta. Esta metáfora, conocida como “El síndrome de la rana hervida”, sirve para explicar la situación en la que mucha gente se encuentra en el trabajo, en sus relaciones o, de esto hablaré hoy, en la información que recibe, procesa y posteriormente comparte. Acaba de comenzar el curso (que los años también empiezan en septiembre no es negociable) y ya tenemos encima de la mesa el lío de siempre. No se trata de algo…

  • Ciencia,  Un tuitero en papel

    Memoria selectiva

    Recuerdo mucho a mis abuelos. Recuerdo habitualmente sus historias, sus consejos, sus puntos de vista tan distantes a lo que éramos sus nietos a su edad. Les recuerdo y me vienen a la cabeza esas tardes interminables de verano en las que nos contaban lo que vivieron, lo que sintieron, lo que sufrieron y lo que disfrutaron a mediados del siglo pasado, que se dice pronto. Tres generaciones en un abrir y cerrar de ojos. Siempre me llamó poderosamente la atención cómo eran capaces de recordar el año exacto de casi cada paso de su vida: en el 42 acabé el instituto, en el 54 llegué a Valencia, en el…

  • Ciencia,  Pensamientos,  Un tuitero en papel

    ¿Hay alguien ahí?

    Si miras una noche de verano al cielo estrellado, me refiero a una de esas veces que se te cae encima, te sentirás pequeño, muy pequeño. Y eso que sólo se ve una minúscula parte de las estrellas que contiene nuestra galaxia, la Vía Láctea, una de las infinitas que componen el cosmos. Se estima que hay unas 10.000.000.000.000.000.000.000.000 de estrellas. He querido poner todos los ceros de 10 elevado a 24 para que el numerito impacte aún más. Hay más estrellas allá afuera que granos de arena en todas las playas del mundo.  ¿Cómo es posible entonces que no se haya desarrollado vida inteligente en ellas? Bienvenidos a la…