Cuando una industria crece tanto como para llamar la atención de diferentes actores económicos a distintos estratos y con un alto componente de transversalidad el motivo debe ser importante. Ese algo en los videojuegos es que ya mueven más que el cine y la música. Juntos. Se estima que hay 2.500 millones de vídeo-jugadores en el mundo. Y a estos números que comienzan a retumbar en los tímpanos de productores, inversores y público final (lo más importante), toca una nueva vuelta de tuerca con la proliferación de los deportes electrónicos (e-sports). Ya a nivel publicitario el sector está ojo avizor con el tema, los “gamers” mueven tanta o más gente…
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Petróleo en Murcia.
Hoy he soñado que encontraban petróleo en Murcia. Un operario de las obras de soterramiento del AVE a su entrada en la ciudad taladraba más de la cuenta y ¡Zas! Un chorro de oro negro de cien metros de altura tiznó su sudorosa cara y de rebote varias manzanas a la redonda. La calidad y cantidad del producto era inusual, expertos venezolanos, americanos y saudíes corroboraron este extremo y de camino al sureste español desde sus jets privados cerraban acuerdos comerciales con nuestras autoridades. Beneficiosos para todos, no tengan duda, decía la coalición que nos gobernaba a través de sus cuatro portavoces al alimón. Nuestra democracia era la envidia general,…
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Con cara de tonto.
Con cara de tonto. No lo puedo evitar. Se me queda cara de tonto cuando escucho a personajillos sin escrúpulos mentir como bellacos para engañar al personal intentando metérselo al bolsillo. Y se lo meten. Si es que en el fondo vamos a ser tontos. O no tan en el fondo. O nos lo hacemos para no tener problemas. Y claro, esos problemas siempre acaban dándose la vuelta y explotándote en los morros. Cuando voy de viaje de trabajo y me pagan las noches de hotel soy incapaz pedir nada que no sea el mero acto dormir y el desayuno. Este fin de semana pasado en Barcelona aboné encantado los…
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Motivos para el optimismo
Las ansiadas vacunas han iluminado el túnel en el que nos encontramos, aunque sea entrando por la otra punta y aún desconozcamos la longitud del mismo.
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Ratoneras
Si metes una rana en agua hirviendo saltará del recipiente instantáneamente, pero si la metes en una olla a temperatura ambiente y la vas calentando poco a poco hasta la ebullición, se quedará frita sin darse cuenta. Esta metáfora, conocida como “El síndrome de la rana hervida”, sirve para explicar la situación en la que mucha gente se encuentra en el trabajo, en sus relaciones o, de esto hablaré hoy, en la información que recibe, procesa y posteriormente comparte. Acaba de comenzar el curso (que los años también empiezan en septiembre no es negociable) y ya tenemos encima de la mesa el lío de siempre. No se trata de algo…
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Relatividad o barbarie
Priorizar es siempre buena idea. Ahora, en el futuro o antes de esta locura. Nunca falla dedicar unos minutos a ordenar mentalmente por importancia cualquier cosa que se te cruza por delante antes de ejecutarla. La organización aparece después, como por ensalmo, si has sabido antes dar el paso previo, el del párrafo anterior a modo de impulso vital, de análisis de inicio, de puesta en marcha metódica y, posiblemente, eficaz. Se convierte en arma de doble filo esta oportunidad de pasar tantas horas con nosotros mismos, algunos consiguen relativizar, otros derivan en comportamientos básicamente primarios. No resulta sencillo jugar en un filo que termina cortando si no hiriendo. Pero…
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La ciencia lúgubre
Corría 1995 cuando en una tórrida tarde de verano murciano recibí las notas de selectividad. Tras cuatro de los mejores años de mi vida en el instituto Alfonso X El Sabio la media no alcanzó para una ingeniería y, teniendo claro que estudiaría una carrera universitaria, tuve que decidirme entre las que no ofrecían resistencia a la entrada: Derecho o Económicas. Parece que fue ayer cuando rellenaba el papel con el orden elegido, unas casillas que marcarían no solo el próximo periplo docente sino también, quién iba a saberlo ahí, el futuro laboral, profesional y hasta familiar que la vida tenía preparado para este que escribe. Siendo sincero, no es…