De continentes y maratones

A veces la mejor manera de sobrellevar una lesión es fijarse un objetivo a largo plazo. Qué digo largo, larguísimo. Y siempre es bueno hacerlo en grupo. Quedan casi dos años para la próxima etapa deportiva que he marcado a fuego en mi calendario. Miedo me da pensarlo viendo cómo tengo las rodillas actualmente: a la rotura hace poco del menisco izquierdo se ha sumado la misma avería en el derecho. Serán los cuarenta o será lo que sea, pero estoy jodido deportivamente hablando. Es curioso cómo el cuerpo puede acostumbrarse a pasar tan rápidamente de entrenar todos los días (incluso muchas veces doblando) a no hacer nada de nada durante semanas. Los kilos vienen tan rápido como las ganas se van. Por eso es ya momento de visualizar, de continuar la recuperación con un puntito más o esto se me va de las manos. Para colmo se ha juntado el hambre con las ganas de comer: Un volumen de trabajo bestial colándose por todas las rendijas del día a día. De septiembre no pasa, cada cuatro años toca priorizar, lo veo venir.

Pero volvamos a los objetivos. Tokio es uno de los míticos “6 Majors” internacionales junto a Boston, Londres, Berlín, Chicago y Nueva York. Tres maratones en América, dos en Europa y uno en Asia. Realmente no me atrae demasiado hacer los seis, pero de uno por continente sí que no pasa. En 2014 fuimos a NYC y en 2015 al de Alemania, en 2020 no podemos faltar a la cita japonesa que además será sede de los Juegos Olímpicos.

Recuerdo perfectamente la organización del primer viaje, donde cincuenta murcianos (la mayoría novatos en la distancia de 42 kilómetros) zarpamos hacia la Gran Manzana con una ilusión en la mente: cruzar la meta de Central Park. Ese 2 de noviembre de 2014 hizo un frío y viento criminales. Aquello no es una carrera, es una peregrinación. Juré, y por ahora mantengo, que no me volverán a ver correr por esas calles. Conseguimos tantos patrocinadores y repercusión que al año siguiente repetimos en Berlín. Nada que ver a ningún nivel: Recorrido, clima ni organización. “Si el Maratón de Nueva York es como Vietnam, el de Berlín es un paseo por la Casa de la Pradera”, dije en alguna entrevista.

Aquí tienes las crónicas de las dos gloriosas aventuras pasadas y toda la información de la próxima, por si quieres acompañarnos al periplo asiático que además de deporte siempre incluye otros notables momentos.

Maratón de NYC 2014

Maratón de Berlín 2015

Será, como los anteriores, un viaje memorable. Ya tenemos las primeras inscripciones y las plazas suelen volar… ¿Te animas a acompañarnos?

 

UN TUITERO EN PAPEL
Nacho Tomás
Artículo publicado en La Verdad de Murcia
13 de junio de 2018

 

Maratón de Berlín 2015

“El Maratón de Nueva York es como Vietnam, el de Berlín es un paseo por la Casa de la Pradera.”

Esta frase me sale del alma al cruzar la meta de la Puerta de Brandenburgo. Feliz, entero, sin dolores, con una cerveza en la mano, el sol en la cara, el Reichstag detrás, sintiendo el césped bajo mis pies y dirigiéndome al hotel dando un paseo con buenos amigos.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Cuando hace un año acabé el Maratón de New York la sensación fue completamente diferente: roto de frío, dolorido, incomunicado, ninguneado por los policías americanos que no dejaron ni que me sentara en Central Park, haciendo colas kilométricas para coger un taxi y llegando al hotel casi 12 horas después de haberlo dejado esa misma mañana. Dos maratones, dos experiencias, quizá por el calentón de ahora podría decantarme por la carrera alemana, pero NYC es mucho NYC. Dejemos que pase el tiempo. O no, mejor ni comparemos.

Este año somos 17 corredores en el grupo NYC2014M, más una docena de acompañantes, el viaje es divertido, qué buena gente, cuántas buenas amistades pueden forjarse en tan poco tiempo. Hacemos piña desde que cogemos el bus dirección Alicante. Cuatro días en Berlín, Zurich, vuelta a Alicante y bus a Murcia. Recuerdos vivos desde el momento en que los vives, imagina en lo que se convertirán luego con la perspectiva y la nostalgia.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Cruzamos los Alpes en avión y me viene a la cabeza cuando hace 12 años los crucé con Marcos en un tren expreso desde Padova, Italia, dirección al genuino Oktoberfest de Munich. Solo me falta hacer una carrera a pie o recorrerlos en bici… Tiempo al tiempo.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Llego algo justo de entrenamiento a la cita berlinesa, los útimos cuatro fines de semana han sido duros: fiestas de Yeste, despedida de soltero, boda y fiesta sorpresa de 40 años a mi mujer. Y cuando hay fiestas, yo lo doy todo, como cuando entreno. Me ha faltado quizá una tirada larga, las únicas que he hecho podido hacer han sido de trail y además he tenido que ir al fisio 3 veces en la semana previa a la carrera, unas molestias inoportunas en el tibial impidieron poner la guinda a la preparación. Sea como sea, preparado estoy, no hay duda. Así que toca darlo todo. Allá vamos.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Suena el Bolero de Ravel minutos antes de la salida y tengo el primer momento místico (reiros sí, pero pocas veces en mi vida he estado tan relajado), dan la salida y comienzo a correr con la estrategia en la cabeza, ritmo fijo a 5:00 minutos el kilómetro hasta la media maratón, suave, demasiado suave quizá, pero ya habrá tiempo de apretar. En lugar de 6 geles como el pasado año, este año llevo 5, me como uno antes de la salida, y guardo el resto en el cinturón para los kilómetros 10, 20, 30 y 36.

Pasan los minutos y todo va al milímetro excepto una parada a hacer pis que no puedo evitar, me relajo aún más si cabe ahora que estoy vacío y sí, mantengo ritmo de crucero hasta el kilómetro 21. Me adelanta muchísima gente, ya nos veremos en meta, pienso para mis adentros, vais a capuzar chavales…

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Cruzo la pancarta de la mitad de recorrido con un tiempo de 1h44m, así que decido subir un poco. Pero duro poco en ese poco, voy tan bien que merece la pena arriesgar y me pongo a 4:30 desde ya. Pasan los kilómetros y ni rastro de molestias, más que los típicos dolores de tobillo con los que convivo desde hace años, no hay de qué preocuparse. Más tarde unas ligeras molestias en piramidal e isquios, pero cambio ligeramente la zancada y adiós muy buenas.

Adelanto cientos, miles de corredores e incluso puedo permitirme apretar aún más en el último cuarto de la carrera, con parciales que rondan los 4:20 sin forzar la máquina. Sonará a chulo, pero voy sobrado y en ningún momento sufro lo más mínimo, incluso disfruto del paisaje, cruzando Berlín de punta a punta, de este a oeste, de norte a sur. Maravilloso trazado que, para más ayuda, viene marcado en la calzada con una línea de tres rayas azules que sigo a rajatabla como un penitente adelantándome en cada curva el lado al que girará en unos metros la calle.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

El recorrido está saturado de espectadores que animan sin descanso, cómo se agradece. Por poner un pero, los avituallamientos algo cortos (en longitud de mesas, me refiero) y sólo en un lado, provocando tapones innecesarios en mi opinión. El resto chapeau, los alemanos tienen controlado hasta el clima, a la hora de la salida unos 8º pero con sol agradable, suficiente para llevar una camiseta de manga larga los primeros 10 minutos y luego directamente manga corta. Ese típico día de invierno en Murcia o Valencia, con frío, pero soleado. Ideal para correr.

La conexión con España es constante, cada vez que paso por encima de una alfombra y suena el chip siento los ánimos de los que están pegados a la web o la aplicación oficial de la prueba siguiéndome los parciales. Vínculo real, os lo juro.

Los últimos 3km voy con el miedo en el cuerpo, en NYC se me bloqueo una pierna casi al final y por más que lo intente, no puedo sacarme de la cabeza esa posibilidad, pero nada, ni rastro de problemas. Voy a saborear estos metros, de estos minutos, de estas caras de los compañeros que adelanto, de los que me adelantan, del público.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Cruzo la Puerta de Brandenburgo por el arco de la izquierda, hay menos gente y quiero sentirme de nuevo solo. Se me hace un pequeño nudo en la garganta. Doscientos metros. Graderío repleto de gente gritando nuestros nombres. Llegada a meta. Excitación. Recompensa. Orgullo.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Paro el crono final en 3h19m48s. He hecho la segunda media maratón en 1h35m, casi 10 minutos más rápido que la primera y muy cerca de mi récord personal en esa distancia. Tremendo…

¡Viva la estrategia y viva la cabeza fría! Sé que en mis patas tengo más, mucho más, veremos qué nos depara el futuro.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

El proyecto NYC2014M se ha asentado y ya estamos pensando el siguiente “Mayor” al que hincarle el diente. Los patrocinadores se han portado tan bien como siempre y nosotros esperamos haberles devuelto con creces su apuesta:

  • Renault Herrero y López: patrocinador principal.
  • Inforges, Mesa del Castillo y Covirán Los Garres: colaboradores principales.
  • Cuídate Murcia: excelentes masajes fisioterapéuticos.
  • Mobel Sport: gracias por las camisetas, alta calidad.
  • Novatour: gracias por el traslado al aeropuerto.
  • N7: qué voy a decir de mi empresa, nos encargamos de la comunicación en general del proyecto.

¡Gracias a todos, mil gracias!

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Y qué decir de mis compañeros de viaje: Marcos García, Antonio Rentero, Antonio Fernández, Pablo Cantero, Paco Molina, Quique Quiñonero, Javi Lucas, Fernando Hidalgo, Sabas Baños, Rubén Lax, Antonio Iniesta, Alejandro Arana, Paco Liaño, Xabi Losada, Diana Cardo y Boticario Sánchez.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Sin olvidarnos de Marimar Román y José Maciá, que no pudieron acompañarnos en el último momento ni de los acompañantes, apoyo imprescindible en estas citas. Gracias también a la gente de Marathinez, Luis y Lidia, generosos y profesionales. Y en especial a mi hermano, amigo y entrenador, Jorge, que con sus consejos y apoyo estuvo continuamente presente.

Marathinez Maraton de Berlin 2015Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

La noche de la carrera lo dimos todo en el Oktoberfest que se organizó en Alexander Platz donde por fin, tras tantos años de cantar la canción de Franco Battiato, tenía el placer de estar:

Alexander Platz auf wiedershen
y había nieve,
nos vemos esta noche fuera del teatro:
“¿Te gusta Schubert?”

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015MMaratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

En el calentón de la vuelta no dejamos de hacer planes a futuro, es la nota habitual en un viaje que te deja huella. Algunos ya están mirando vuelos y dorsales para los maratones de Roma y París de 2016, aunque el proyecto NYC2014M oficialmente no hará nada hasta 2018 en el que, muy probablemente, nos vayamos a… (redoble de tambores)… un país muy muy muy lejano… ¡Seguiremos informando!

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Respecto a Berlín como urbe, sorpresa total, una ciudad única, mezcla heterogénea de modernidad puntera y decadencia ochentera. Cada calle es un mundo y junto a grupos de hipsters bailando alrededor de un “artista” y bebiendo (curioso la cantidad de gente que va por la calle con una botella de cristal de cerveza en la mano) encuentras abuelas sacadas del otro lado del muro sentadas en las puertas de sus casas, charlando con las vecinas. Suciedad y limpieza, belleza y ruinas.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015MMaratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Tanto la noche del viernes, el día que llegamos, como la del domingo, las dedicamos a hacer algo de turismo por la ciudad. Turismo y cervezas, claro. Y codillo, que no falte. Los canales y el Spree dan ese toque mágico que tienen las ciudades con río.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015MMaratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015MMaratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015MMaratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

El único muro que tuve esta vez fue el de la foto, ¿suerte o buen entrenamiento? Cómo echo de menos la bici y nadar, han sido 44 días sólo corriendo. Menudas ganas de bracear y pedalear.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Que no se me olvide contar la cantidad de bicis que hay en Berlín, reconforta verlas por todos sitios: calzada, aceras, paseos, parques, carriles bici… Respeto total por parte del resto de vehículos y muy pocos coches privados, al menos en el centro de la ciudad. Para aprender.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Llego a Murcia cansado, con sueño y resaca, el viaje de vuelta ha sido muy largo, salimos del hotel a las 9:45 y llego a mi casa sobre las 22:00, doce horas de aviones, autobuses y mucho andar.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Llego a Murcia contento, con otra medalla al cuello. Parece que no se me da mal esto de organizar viajes, las caras de mis compañeros de viaje y sus miles de whatsapps posteriores te ponen las pilas. Veo a mis hijos y mi mujer, que esta vez no han podido acompañarme y la alegría es plena, completa, total. Rebosante.

Maratón de Berlin 2015 - Nacho Tomás - Berlin2015M

Volveré.

Y espero que estés ahí conmigo, si no corriendo a mi lado, al menos leyéndome.

 

 

 

 

 .

Próxima parada: Maratón de Berlín

Pues ha llegado el día, mañana sale el avión hacia Berlín y el domingo toca recorrer la ciudad corriendo. Por delante 42kms apasionantes por las calles de una ciudad que, tiene su gracia, todavía no conozco. ¡Qué mejor manera de hacerlo que pateársela trotando!

Este viaje es el segundo que hemos organizado desde la Asociación Deportiva NYC2014M. Ya veremos qué pasa el año que viene… seguid atentos a las novedades en nuestra web: www.nyc2014m.com Aprovecho para dar mis más sinceras gracias a los patrocinadores que nos apoyan.

 

Berlin Marathon Map

Qué curioso que este año 2015, el Maratón de Berlín cumpla su 42º edición. Y más curioso aún es que mi segunda prueba en esta distancia sea aquí, tras el año pasado cruzar la meta de Central Park en Manhattan, NYC.

En mi mente estos días no para de sonar la archiconocida canción de Leonard Cohen y su estribillo: “First we take Manhattan, then we take Berlin.”

Espero mejorar el tiempo que hice en mi estreno en la Gran Manzana, donde paré el crono en 3 horas y 42 minutos, este año el objetivo es mucho más ambicioso: 3 horas y 29 minutos, por debajo de 5min/km. Ya veremos si lo consigo.

Dorsal Maraton de Berlín

Si quieres seguirme en directo durante la carrera, puedes descargarte la app oficial y meter mi nombre (Ignacio Tomás) o el dorsal (35143).

También se puede seguir por televisión (aunque dudo mucho que me veais por ahí) en estos canales:

Será un placer recibir tus ánimos tanto por aquí en forma de comentario como en directo a través de Facebook o Twitter.

¡Nos vemos en la Puerta de Brandenburgo!

 

 

.

Mucho más que un maratón.

Son las 13:27 del domingo 2 de Noviembre cuando atravieso la meta, situada en Central Park, del Maratón de New York City 2014.

Ha amanecido con ráfagas de viento de hasta 64km/h y temperaturas cercanas a cero grados, un clima que provoca encontrarnos con la carrera más lenta desde 1994, obliga a reducir algunas señalizaciones y hace cancelar un tramo a los participantes en silla de ruedas.

NYC2014M Nacho Tomás

Pero lo peor está por llegar: una vez terminada la prueba tengo que subir hasta la calle 82, por la que debemos salir del parque, envuelto en una manta térmica, rodeado por cientos de corredores de los que sólo conozco el dorsal, en procesión a ninguna parte entre penumbras, con calambres en las piernas y temblores en aumento que por un momento me hacen temer una hipotermia. Es el día que más frío tengo de mi vida. Nunca lo había pasado tan mal, ni con nieve por las rodillas en plena sierra.

No encuentro a mi mujer, los teléfonos no funcionan, los altísimos edificios tapan el poco sol que parece haber, no hay cafeterías ni bocas de metro, las calles están cortadas y tengo que andar 40 minutos para localizar un taxi. Llego al hotel dos horas después de cruzar la línea de llegada, exhausto, congelado, con un nudo en la garganta y más sólo que la una, pero con una medalla colgada al cuello que arranca un “congratulations” a todo aquel con el que me cruzo.

Lejana queda ya la partida del hotel a las 6AM, abrigados hasta las cejas: pantalón largo de chándal, chaqueta polar, gorro, braga y guantes, además de la ropa con la que participaré en la prueba: pantalón corto, camiseta térmica de manga larga y otra de manga corta encima, la de nuestro equipo NYC2014M.

Sobre las 7 estamos en Fort Wadsworth, pero aun quedan casi 3 horas para escuchar el cañonazo de salida, que se dará a las 9:40 para los corredores de la primera oleada, entre los que me encuentro. Se trata de unos momentos interminables en los que el frío me atenaza. Llevo bolsas de plástico en los pies y los 55.000 participantes nos apelotonamos como podemos para entrar en calor. Hay tiendas de campaña, cartones y mucha ropa tirada por el suelo en montones que cada vez se hacen más altos. Ropa que será entregada a los necesitados, por lo que no duele nada deshacerte de ella conforme pasan los kilómetros.

Fort Wadsworth NYC2014M

Quiero controlarme por el miedo a desfondarme y no ir más rapido de 5:15 min/km durante todo el reocorrido, pero es imposible. La gente me lleva, voy conociendo historias de compañeros de asfalto y me veo tan fuerte que los primeros 25 kilómetros los hago sin ningún problema a 5:00 clavados, hablando incluso de vez en cuando con los que tengo alrededor. A partir de ahí bajo un poco cuando la fatiga asoma, y decido dejar ver cómo se escapa la señal de 3 horas 30 minutos que había tenido al lado hasta este momento, diciéndome a mí mismo lo poco que importa acabar 15 minutos más tarde. Se me pegan las subidas de los puentes y las avenidas eternas, con varias rectas infinitas de 6 o 7 kilómetros. Es mi primer maratón y si no pasa nada grave, terminaré sin problema. Ya habrá otras oportunidades de mejorar la marca. Hoy no es el día.

Han sido 3 horas, 42 minutos y 5 segundos corriendo sin parar ni un metro, con la idea fija de “At least I never walked” de Murakami repiqueteando en mi cabeza en cada zancada. Un periodo de tiempo que da para pensar en  todo el mundo, comenzando por mis hijos Paz y Nacho, sin duda la gasolina más potente, al que sumo los millones de personas con las que me cruzo y los cientos que corean mi nombre, impreso en la camiseta. No creo que nunca viva una sensación de apoyo en carrera semejante.

Antonio Rentero, mi nuevo hermano desde este viaje, me dice en los momentos previos a la salida (para el recuerdo nuestro abrazo al separar la Blue y la Orange Wave) que hay un momento Zen antes de cruzar la meta, en ese tramo parecido a un bosque que verás unos metros antes de terminar. Pero no, mi tramo místico ha sido un poco antes. El cuádriceps ha dicho basta en el kilómetro 38 y por un momento me temo lo peor. Mi pierna derecha es un bloque de hormigón. Cierro los ojos mientras continúo corriendo y aprieto el ritmo: el cansancio me ha hecho descuidar la técnica y quiero creer que es el motivo del problema. Hago ese kilómetro a 4:30, el más rápido de todos, obsesionado en destensarme. Tiemblo. Parece que se va. Casi sonrío. Trago saliva y bajo gradualmente de nuevo el ritmo. Tranquilo, Nacho. ¡Funciona! Los dos últimos kilómetros son los más lentos de todo el recorrido, pero ya qué más da. Soy finisher del Maratón de NYC.

NYC2014M Nacho Tomás

En el hotel, me meto a la ducha y luego a la cama sin ni tan siquiera estirar. Mi mujer llega por fin y ahora sí, lloro un buen rato: emoción, nervios, dolor de patas, todo revienta al mismo tiempo en una explosión en forma de agua salada. Más tarde miro el teléfono, he querido dejarle a ella el honor, más que merecido, de ser la primera en saber de mí directamente. Creo que nunca la he necesitado tanto. Miro el Whatsapp, abro Twitter, chequeo Facebook y descubro miles de notificaciones. Miles. Literal. Las he notado durante la carrera. Lo juro.

Me he acordado de todas y cada una de las personas que conozco, milla a milla, metro a metro. Y cómo olvidar a los chicos que continuamente quieren chocarme los cinco y me han servido de empuje. Pienso en sus madres, sus padres, sus abuelos, sus hermanos, sus amigos… Tienen problemas, se les ve en la cara, se les ve en los cuerpos. Maldita sea, ¿quién soy yo para sufrir lo más mínimo? ¿Quién soy yo para no sonreirles a todos y cada uno de ellos mientras siento sus manos contra las mías? Ellos son el ejemplo. Nosotros corremos porque ellos no pueden hacerlo. Sólo eso. Nada más sencillo y eterno.

NYC2014M Nacho Tomás

Deportivamente no ha sido tan duro como me esperaba. He cruzado los cinco boroughs de la ciudad: Staten Island, Brooklyn, Queens, The Bronx y Manhattan y casi ni me he enterado. He tenido a mi alcance vistas de edificios inmensos recortados contra el cielo y puentes de diversas arquitecturas y sólo los he visto de reojo. La mirada de la gente ha sido mi visión preferida. Y no me arrepiento.

He compartido unos días con muchas personas que no conocía de nada y espero sigan formando parte de mi vida durante mucho tiempo: Antonio, Marimar, Ángel, Xabier, Juan, David, Miguel Ángel, Sabas, Carlos, Juan Antonio, Ivan, Javier, Ana, Diana, Conchi, Fernando, Miguel, Jorge, Manuel, Paco…

El maratón de NYC no es una carrera, es una peregrinación. No se compite, sólo se corre, se gira el cuello, se piensa mucho (muchísimo), se escucha uno a sí mismo y se mira fijamente a los ojos de los tullidos que desde la acera te gritan “God bless you“.

nacho-tomas-maraton-de-nyc-2014

 

 

 

.

Camino al Maratón de New York.

Dos años después ha llegado el día. Han sido miles de kilómetros de preparación para mi estreno como maratoniano. ¡Y en qué lugar!

Runners make their way through Queens du

Me espera Nueva York, me espera New York City. Ciudad a la que vuelvo 6 años después. Esta vez mucho mejor acompañado. Voy con mi mujer, mi apoyo, mi perfecto complemento.

Me espera una competición épica, me espera cruzar la meta de Central Park el domingo a las 13:30 aproximadamente (hora de la costa este de los Estados Unidos, 5 horas más en España). No tengo miedo a la carrera en sí, me asusta más el cambio horario, el viaje, la alimentación de los dos días de antes e incluso la ropa con la que correré, pues dan temperaturas cercanas a 0ºC en la salida.

Por primera vez en años no compito contra el tiempo, iré a terminar y disfrutar, aunque suelo disfrutar sufriendo, todo sea dicho, y sea cual sea la marca final el triunfo ha sido organizar un sueño para casi 40 personas que se han unido a una visión inicial que se fraguó en un “calentón” con Antonio Rentero allá en 2012.

Si os interesa seguirnos en directo podéis descargar la app oficial aquí: LINK Tenéis que buscar por dorsal (el mío es el 8756) y se supone que os irá informando de nuestros tiempos cada 5 kilómetros, a la mitad de carrera y al final de la misma. También estamos en Twitter usando el hashtag #NYC2014M en el que seguir nuestras andanzas por la Gran Manzana.

Siento vuestros ánimos, estoy seguro de que me acordaré de cada uno de vosotros durante los 42 kms más bonitos de mi vida.

¡GRACIAS!

NYC Maraton

Foto corredores: Getty
Logo NYC2014: Diseño propio

 

 

 .